Un niño de contrabando (Brotes de olivo)
Sevilla, calle del Vidrio, las cinco de la mañana. Viene a la vida el cantor de la mística más blanca, Tan precioso era aquel niño que su madre lo ocultaba Tal sentimiento de madre en su vida le marcó, Un día tardó en volver, la madre mandó a su hermano, Lo vio en una procesión. Díjole el niño perdido: |