Rey de los cielos y tierras, haz que tu fama me venga, hasta mi pobre persona, y que note tu presencia.
Bendita tu vida, bendita tu gloria, bendita la gente que en ti hace historia.
Que los árboles se agachen y los matorrales vuelen, para que todos perciban la gloria de Dios que viene.
Que todos canten con vida, ˇviva la gloria de Dios! y entre aquellos que lo canten, que siempre me encuentre yo.
Hosanna...