Gloria, gloria, aleluya

Gloria, gloria, aleluya. 
Gloria, gloria, aleluya. 
Gloria, gloria, aleluya. 
En nombre del Señor.

Cuando sientas que tu hermano 
necesita de tu amor, 
no le cierres tus entrañas 
ni el calor del corazón; 
busca pronto en tu recuerdo 
la palabra del Señor: 
mi ley es el amor.

Cristo dijo que quien llora 
su consuelo encontrará; 
quien es pobre, quien es limpio, 
será libre y tendrá paz. 
Rompe pronto tus cadenas, 
eres libre de verdad: 
empieza a caminar.

Si el camino se hace largo, 
si te cansas bajo el sol, 
si en tus campos no ha nacido 
ni la más pequeña flor, 
coge mi mano y cantemos 
unidos por el amor. 
En nombre del Señor.